La UE o, más bien, el Comité de Representantes Permanentes (Coreper), que reúne a los embajadores de los países miembros de la Unión Europea (UE) decidió anoche en Bruselas reabrir sus fronteras del 1 de julio a catorce países entrev ellos, Marruecos pero no a los Estados Unidos, Rusia, Israel, Brasil o Turquía. Los 27 miembros de la Unión Europea acordaron seleccionar inicialmente Argelia, Australia, Canadá, Georgia, Japón, Montenegro, Marruecos, Nueva Zelanda, Ruanda, Serbia, Corea del Sur, Tailandia, Túnez y Uruguay.
Se consideró que la noticia era normal en Washington, y el Secretario de Estado Mike Pompeo dijo que Estados Unidos “ciertamente no quería causar problemas en otros lugares”. China ha disfrutado de un estatus especial, pero solo a condición que respete el principio de reciprocidad permitiendo que los europeos viajen a China.
Actualmente, este no es el caso, pero podría serlo a largo plazo. El Reino Unido, dado que todavía es parte de la UE durante el período de transición antes del Brexit, ha sido tratado como un país miembro. Algunos países renuentes han solicitado un retraso argumentando a este respecto, la gestión de fronteras, que es una competencia nacional. Por lo tanto, se reservan el derecho de no abrirse a todas las catorce nacionalidades seleccionadas, pero se comprometen, por otro lado, a no aceptar nacionales de otros Estados.
La lista no exhaustiva de países autorizados a poner un pie en los países de la UE se establecería definitivamente antes del sábado por la noche y se aprobaría el lunes por mayoría cualificada. Debe estar sujeto a revisión cada dos semanas, para incluir o excluir países, una serie de criterios que se tienen en cuenta, el principal, un enfoque de salud cauteloso. Para que un país sea elegible, en particular debe presentar una tasa de nuevos casos de coronavirus (Covid-19) cercana o inferior a 16 por cada 100.000 habitantes (promedio en la UE) durante las últimas dos semanas.
Fuente: Hespress
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