Aprovechando el restablecimiento
de las relaciones entre Marruecos e Irán, más de 3 años después del fracaso de
su primera tentativa, los chiitas de Marruecos han logrado crear en Tetuán un
marco asociativo para reunirse.
De tal modo que
podemos decir que los chiitas marroquíes se organizan en una nueva instancia bautizada
“Rissalis progresistas”. También han logrado celebrar, según “Yabiladi” el sábado
16 de abril en Tetuán, la asamblea constituyente de su asociación. Al término
de la adopción de los estatutos internos, los chiitas han confiado la
presidencia de su organización a Abdou Chougrani, asimismo miembro del PSU
(Partido socialista unificado) de Nabila Mounib.
La reunión no ha
podido celebrarse en la sede regional de la asociación marroquí de defensa de
derechos humanos, sin el aval de los representantes locales del ministerio del
Interior. El procedimiento exige, efectivamente, la luz verde de un agente de
autoridad (el Caid) antes de la celebración de toda actividad cultural, política
o económica en una sala pública o privada.
Este acontecimiento
constituye un avance en relación a lo que prevalecía hace 3 anos. En octubre
del 2013, las autoridades de Tánger rechazaron todas las solicitudes del comité
preparatorio de “Rissalis progresistas” para autorizarles lanzar su asociación desde
la capital del estrecho, conocida como fortaleza del chiismo marroquí.
Ahora incumbe al ministerio
del Interior decidir a través de la Wilaya de Tetuán a la que corresponde el
derecho de acordar o no la autorización a los chiitas. Sin embargo hay muchas
esperanzas de que la respuesta del Interior sea positiva. Un eventual rechazo seria
contrario al contenido del mensaje real a los participantes en el congreso sobre
“ los derechos de las minorías religiosas en tierra del islam: el marco jurídico
y el llamamiento a la acción”, celebrado en Marrakech del 25 al 28 de enero
pasado.
El soberano había precisado
entonces que “nada nos parece justificar, en el reino de Marruecos, que minorías
religiosas estuvieran privadas de alguno de sus derechos. No aceptamos que esta
negativa de derecho sea cometida en nombre del Islam o contra un musulmán,
cualquiera que sea”.
Esta posición real había
sido saludad por los chiíes marroquíes mediante la publicación de un artículo
en su página Web Ressali.com. Un movimiento de izquierda islámica.
Los “Ressalis
progresistas” se autodefinen como de izquierda y asi lo indica una declaración que
data del 22 de febrero pasado, considerándose como la encarnación marroquí de
la corriente “la izquierda islámica” que había invadido al mundo árabe al día
siguiente de la revolución islámica en Irán en 1979. Sus promotores preconizan
un “matrimonio de razón” entre los valores del socialismo y los principios del
islam que instan a la justicia social y a la repartición equitativa de las
riquezas.
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