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Por: Bill Van Auken (revista de prensa Mundialización
y traducción al español de “conacentomarroqui”)
Negociaciones sobre el sangriento conflicto armado de
Siria tuvieron lugar el jueves pasado en Múnich con un fondo dela ofensiva gubernamental
siria apoyada por incursiones aéreas rusas destinadas a romper la empresa de
los “rebeldes” apoyados por el Occidente, en la parte oriental en ruinas de
Alepo.
Las conversaciones se celebraron bajo los auspicios de
los 17 miembros del grupo internacional de apoyo a Siria que comprende a
Estados Unidos y sus aliados regionales (Arabia Saudita, Turquía y Qatar) en la
guerra para cambiar el régimen en Siria, Rusia e Irán (en tanto que aliados de
este régimen).
Washington ha exigido un alto el fuego inmediato y un
cese de las incursiones aéreas rusas en Siria. EEUU, las monarquías del Golfo y
el régimen turco temen que sin cesar los combates, las milicias terroristas que
apoyan, financian y arman desde hace cerca de 5 años van a perder
irremediablemente la partida que tanto les costo.
Rusia propuso, por su parte, un alto el fuego que comenzaría
el primero de marzo, dando, de esta forma, el suficiente tiempo al gobierno
sirio para restablecer su control sobre Alepo.
El viernes pasado, el secretario de Estado John Kerry
y el ministro ruso de exteriores Serguei Lavrov anunciaron haber llegado a una distensión
de principio para un alto el fuego “dentro de una semana” y una aceleración de
la ayuda humanitaria.
Kerry ha reconocido que aunque el acuerdo figura en “los
papeles” queda aun que se demuestre la voluntad política. Todos los conflictos
subyacentes siguen sin solución y las operaciones militares americanas y rusas
van a proseguirse en nombre de la lucha contra el llamado “Estado islámico”.
En vísperas de estas conversaciones de Múnich, Kerry
formulo en una entrevista con el cronista David Ignatius del Washington Post,
una inequívoca amenaza relativa a la estrategia de negociación de Estados
Unidos en Múnich: “Lo que hacemos es probar la seriedad (rusa e iraní)” dijo “y
no son serios por lo que se debe considerar un plan B… no se puede permanecer aquí”.
Un “Plan B” consiste en una brusca escalada de la intervención
militar americana en Siria, realizada con la mascara de lucua contra Daesh,
pero con el claro objetivo de derrocar al gobierno Assad.
Riad y Doha habrán discutido también de un “Plan B”
estos últimos días, en el que participarían en una intervención militar directa
para salvar a los “rebeldes” que apoyan ahora de manera descarada. La agencia
de prensa saudita “Al Arabia” ha citado a responsables de Riad que confirmaba
la decisión de su país a enviar tropas a Siria para una invasión hostil y
provocadora.
(Continuara)
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