En efecto, por instrucciones del
rey Mohamed VI, el ministro de AAEE/Cooperación, Salahedine Mezouar ha
informado al secretario general de la Liga árabe de la decisión de Marruecos de
ceder su derecho de organizar la Cumbre árabe.
Según un comunicado del
ministerio marroquí de exteriores, su titular ha sido encargado por el Soberano
de comunicar esta decisión al secrétariat general de la Liga árabe, Nabil
Larabi.
Esta decisión, según el
comunicado del MAEC fue tomada conforme a la carta de la Liga árabe y a base de
concertaciones con muchos Jefes de Estado árabes.
“Las condiciones de éxito de la
Cumbre árabe no están reunidas”, subraya el comunicado. El desgarron del mundo árabe,
en el que muchos países se enfrentan en fratricidas guerras, necesita,
efectivamente, una acción común para detener el ciclo de violencias.
“Habida cuenta de los desafíos a
los que hace frente el mundo árabe hoy, la Cumbre árabe no puede ser en si
misma un fin para convertirse en simple encuentro de circunstancia”, precisa el
comunicado, que explica que renunciando a la organización de este gran conclave
árabe, Marruecos “proseguirá su constante acción al servicio de las cuestiones árabes
y contra las divisiones confesionales que alimentan el repliegue y el
extremismo”.
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