Orígenes medievales y turbias del sionismo “Occidente e Islam” obra maestra del franco-marroquí Youssef Hindi

“France-Irak-Actualité”/Said Jedidi

 

“Editions Sigest* acaba de publicar “Occidente e Islam” una obra excepcional sobre los orígenes del sionismo y de la teoría neo-conservadora confusa llamada “choque de civilizaciones”.

Youssef Hindi, joven investigador franco-marroquí analiza, sólidas pruebas en la mano, proyectos mesiánicos elaborados en el siglo 13 en algunos círculos rabanicos cabalistas. 

Una obra que se debe leer sin necesidad de compartir sus líneas maestras y sus orientaciones históricas.

A continuación una entrevista con el autor, realizada por nuestros compañeros de “France-Irak-Actualité”:

FIA: Usted defiende en su libro una nueva tesis respecto al sionismo. ¿Puede presentarla brevemente?

Youssef Hindi: La tesis principal de mi libro es la siguiente: contrariamente a la idea extendida, el sionismo no es una ideología ateísta, tampoco había nacido, como creen algunos historiadores como Shlomo Sand, entre los medios protestantes puritanos ingleses en el siglo XVII.

El sionismo es en su origen un proyecto mesiánico, nacido en los círculos rabanicos en la Edad Media, a partir del siglo XIII. Este proyecto ha madurado y se ha reforzado, al trasformarse a través de los siglos para acabar como ciertas ideologías modernas en el siglo XIX para adquirir una apariencia ateísta.

No es la única tesis que defiendo en esta obra. Este movimiento mesiánico activo que ha dado lugar al sionismo ha engendrado paralelamente la estrategia del “choque de civilizaciones” y el mito del judeo-cristianismo desde el comienzo del siglo XVI.

FIA: Que estos proyectos e  ideas hayan n acido en la Edad media es una cosa, pero ¿Cómo explica el hecho de que han logrado atravesar las épocas? Más aun: ¿Cómo estas ideas religiosas se ha, transformado para acabar, como lo señala usted, tomando una apariencia ateísta? ¿No es una contradicción en los términos?

Yossef Hindi: A lo largo del libro ilustro esta tesis fundamental que n o parece, obligatoriamente, a la primera lectura: la actualización de las ideas en la Historia. La Historia esta impulsada, animada por fuerzas que son las ideas, las ideologías que se forman, transformándose y extendiéndose. Estas nacen en el espíritu de los hombres y los guían así como a los grupos activos que forman. Son estos grupos animados por estas ideas que hacen la Historia.

Por otra parte, avanzo mis afirmaciones paso a paso con una gran prudencia y fuentes variadas y sólidas (423 notas en lo bajo de la pàgina).

Pongo en evidencia la coherencia del proyecto que se extiende a través de más de 7 siglos, tratando minuciosamente de mostrar los vínculos existentes entre las series de acontecimientos importantes y a menudo desconocidos que habían “cambiado” de manera decisiva el curso de la historia.

El mesianismo judío ha conocido una fase de transición entre finales del siglo XVII y en el curso del siglo X VII con la corriente sabato-frankista. Este fuerte movimiento histórico, mesiánico, apocalíptico y Antinómico (que se opone a Dios y a la ley natural) que ha nacido con los falsos Mesías Sabbatai Tsevi y Jacob Frank (uno falsamente convertido al Islam y el otro al catolicismo) ha trazado una vía que conduce a un mesianismo ateísta que dio lugar a una apariencia materialista al amplio proyecto mesiánico. De este movimiento van a nacer las revoluciones utopistas libertarias y socialistas de los siglos XIX y XX.

Fue en este mismo periodo cuando iba a emerger en Europa central –allí donde, justamente iban a abundar’ los movimientos revolucionarios ateístas- el sionismo bajo su forma ateísta.

 FIA: ¿Que hay entonces de la teoría del “choque de civilizaciones”?  Usted afirma que esta vinculada al sionismo y al mesianismo ¿No cree que se trate de una especulación relacionarlo todo al mesianismo?

Youssef Hindi: El “Choque de civilización”  no es, de ningún modo, una teoría, sino una estrategia/ Mis investigaciones muestran que esta estrategia ha sido elaborada por un cabalista que se llamaba Solomon Moleho – sobreviviente de las interpretaciones abanicas y escatológicas de la Biblia- quien en siglo XVI ha intentado lanzar la iglesia luego el Santo- Imperio romano germánico, en una guerra contra el Imperio otomano a fin de expulsar a éste de Palestina y reconstruir en ella el reino de Israel. Es precisamente lo que los británicos han hecho al salir de la Primera guerra mundial mediante el desmantelamiento del Imperio otomano y la creación del “Hogar nacional judío” en Palestina (1919-1920) a la  luz de la promesa hecha por los ingleses a los sionistas en la declaración Balfour (1917). El proyecto de Molcho ha esperado 4 siglos antes de cobrar cuerpo pero finalmente no se ha realizado, esta es una de las pruebas que aporto en tanto que demostración de la permanencia del proyecto mesiánico y del lazo intrínsico existente entre el sionismo y la estrategia del “choque de civilización”, siendo la segunda la condición previa a la realización del primero.

En 1957 Bernard Lewis, el maestro de Samuel Huntington “adoptó” esta estrategia mesiánica dándole un aspecto científico para erigirla, de esta forma, en teoría Lewis, en digno heredero de Molcho, en la óptica de guerras entre el mundo (pos) cristiano y el mundo musulmán., decreta entonces que estas dos grandes religiones estarían antológicamente condenadas a enfrentarse. Es este mismo Bernard Lewis de confesión judía y poseedor de nacionalidades israelí, botánica y estadounidense quien obro a comienzos de estos años 2000 para convencer a Dick Cheney, entonces vice-presidente de Estados Unidos a enviar a EEUU a la guerra contra Irak.

Este “choque de civilización” fabricado desde el comienzo hasta el fin no es en el fondo más que la falsa nariz de lo que yo llamo “un choque ideológico mundial” que opone el mundo veterotestamentario, que abarca el bloque anglo-tala socrático, sus raíces antiguamente católicas del viejo continente, las petromonarquias wahhabitas e Israel, al resto de la Humanidad.