testimonio de Said Tifani, “combatiente” marroquí de “Dae’sh”: Sexo, vicio y represión… Modo vivindi del “EI”

Declarado muerto el 3 de junio pasado, Said Tifani, un “combatiente” marroquí de la organización terrorista “Dae’sh” aparece en la cadena de televisión árabe basada en Dubai “Alaan” contando su historia con la banda terrorista, citada por “Yabiladi”.

Oriundo de Boujniba, en la provincia de Khouribga, el mercenario marroquí se ha incorporado, según  su propio relato, al llamado “Estado Islámico” con su esposa hace más de un año.

Desde su llegada a Siria, Said tuvo la desagradable sorpresa de descubrir la crueldad de la banda terrorista. Los seudo yihadistas se apoderaban de las mujeres y las enviaban a un campamento reservado a las mujeres de los “combatientes”. Después de un mes y medio sin ninguna información sobre su esposa, Said fue enviado para “combatir” en Irak.

 

A su regreso vuelve a descubrir otra sorpresa de mal gusto: la desaparición de su esposa. Al buscar a diestro y siniestro, Said descubre que un tal “Aba Moad Aturqui” la llevó hacia la ciudad de Homs. Said decide seguirla, pero no encuentra ningún rastro de su esposa en esta ciudad. Desesperado, regresa a Raqqa donde de nuevo encuentra una nueva sorpresa: su esposa con uno de los jefes de la organización criminal.

Capturado actualmente por las fuerzas kurdas, el falso yihadista marroquí acaba de acordar una entrevista a la cadena de televisión emirato “Alaan”. “Se trata de un tema muy sensible, conozco muchas historias parecidas a la mía, mujeres secuestradas, violadas y alejadas de sus esposos. Son victimas de métodos bárbaros de estos “yihadistas” sobre todo cuando sus esposos están en misión de ‘combate’”.

Estas mujeres se han convertido, ante la mirada pasiva de Estados Unidos, su coalición y sus domésticos regionales, en una mercancía como cualquier otra mercancía, considerada por los mercenarios de “Dae’sh” como trofeo de guerra.