Otro incendio se ha
declarado el lunes pasado en un bosque del parque Talassemtane, en la comuna de
Talambot en Chauen, siendo controlado, según un comunicado de la Alta comisaría para agua y
bosques de la región Tánger-Tetuán, por las autoridades.
Como siempre en este
tipo de tragedias ecológicas la noticia no es el control ni los esfuerzos para
sofocar el fuego sino la cantidad de la vegetación asolada: 95 nuevas hectáreas,
esencialmente macizos, pinos marítimos y otras plantas inflamables.
Las causas del incendio
que no ha podido ser controlado hasta el miércoles ni por qué se repite cada
vez que las temperaturas suben un poco, siguen
hasta ahora desconocidos aun que se evoca el excesivo calor, los fuertes
vientos y la profusión de las hierbas como elementos que han dificultado el control
del drama ecológico.
Esta parte de Marruecos conoce, cada verano y
a veces incluso en el invierto u otras estaciones del ano, incendios que están
dejando a Chauen y arrabales con
pulmones realmente vulnerables.
Todos los anos lo
mismo sin que las autoridades,
especialmente Aguas y bosques anunciaran una estrategia para, sino acabar con
estos atentados contra el ecosistema de la región y del país, por lo menos
palias sus nefastas consecuencias sobre todos los planos, especialmente ecológico.
Bastaría por optar por
una estrategia de profilaxis y de prevención, lo que significa una movilización
de la población local y una campana de explicación y de orientación a comienzos
del verano y, de ser posible, periódicamente.
De hecho el medio
ambiente es lo suficientemente serio como para no dejarlo exclusivamente entre
las manos de los oficiales. Es una responsabilidad compartida y más
concretamente de las ONG y las asociaciones que obran en este ámbito.
El comunicado de Aguas
y bosques destaca que el incendio ha sido controlado gracias al recurso a 7
aviones de la Gendarmería
real y a la movilización de medios técnicos terrestres así como al despliegue
de 300 personas. Paralelamente a estos medios, elementos de la protección civil
y de Aguas y bosques, fuerzas aéreas reales, fuerzas auxiliares, autoridades
locales y benévolos han participado en las operaciones de circunscripción del incendio.
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