El ex analista de la Agencia de Seguridad
Nacional de estados Unidos (NSA), Edward Snowden había revelado que la organización
terrorista “Estado islámico” había sido creada por un trabajo conjunto entre
los servicios de inteligencia de EEUU, Reino Unido e Israel. O sea: por sus
servicios secretos (M16, CIA y el Mossad).
Snowden no revelaba ningún “scoop”.
Antes de él hizo lo mismo Hillary Clinton en declaraciones que, posteriormente,
nadie como habían salido de su contexto inicial y como fueron trasformadas para
convertirse, pese a ser de una ex Secretario de Estado y ex y actual candidata
a la presidencia de Estados Unidos, en una “pura invención” o por lo menos “tal
como fueron reveladas”.
El ex empleado de la NSA ha explicado que el
objetivo de crear este monstruo consiste, según la agencia rusa Russia Today,
en formar una organización (entidad) terrorista, capaz de atraer a todos los
extremistas del mundo a un sitio, usando una estrategia llamada “el nido del avispón”.
La teoría parece creíble,
tanto más que la única solución para la protección de Israel es “crear un
enemigo cerca de sus fronteras”.
En oriente medio, unos más que
otros, casi todo el, mundo es conciente, sin necesidad de las revelaciones de Edward
Snowden, que Dae’sh y demás grupos terroristas son industria israelí-americana.
Otra cosa seria la protección de la entidad sionista.
Tanto en Irak como en Siria ha
habido una serie de indicios que corroboran esta paternidad.
En el primer país, en muchas
ocasiones autoridades locales en zonas de combate habían denunciado lo que
testimonios oculares contaban: masiva ayuda aerotransportada por cargos americanos
no identificados y sin matricula a Dae’sh y otros grupos terroristas,
especialmente Nusra en Siria.
Bagdad posee, según fuentes
concordantes sólidas pruebas de este apoyo logístico-militar y damasco de la implicación
directa de Israel para socorrer a los mercenarios de Nusra.
Pero el problema no está en
quién ayuda el terrorismo en Oriente Medio, porque todo el mundo, como antes
dicho, lo sabe, sino, casi 5 años después de la creación del “nido del avispón”
¿que objetivos se han realizado?
A juzgar por el curso de los acontecimientos
ninguno y las pérdidas colaterales son enormes. Entre otras, la expansión
terrorista, sin previo aviso a los creadores, a zonas no incluidas en la
estrategia inicial del Pentágono ni del Reino Unido ni de Israel, la
incapacidad de Nusra de proteger las cercanías del Golan ocupado, creando
argumentos para atraer a Hizbulah a la zona lo que ha constituido/constituye
una inquietud suplementaria para Israel. El curso de los combates en el Kalmun
libanés actualmente, han corroborado esta incapacidad y la superioridad, casi
insalvable de la resistencia islámica libanesa. Luego, la dimensión, a todas luces,
difícilmente determinable del alcance y de la facultad de adaptarse en otros
lugares como Túnez y la fronteras entre este país y Argelia y entre ésta y
Libia e incluso Marruecos.
Lo que parecía una fuerza
controlada, escapa, cada vez más al control y países como Líbano o Siria a
pesar de la impresionante cantidad de países que apoyan al terrorismo en sus territorios
y la total ausencia de la ayuda americana están dando ejemplos y lecciones de
cómo se puede acabar con esta lacra terrorista.
De donde, la actual dirección:
Egipto Libia, Túnez etc puede conocer, en el momento menos pensado una inflexión
para desviarse hacia los países que contribuyeron a la creación y que se encargaron
de la financiación porque, de una manera u otra el terrorismo no se quedara sin
nada, si sale de Irak y Siria debe encontrar otro “cobijo”.
Y es que, desde ahora en adelante, Dae'sh no desaparecerà, sino se transformarà.
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