Las, hasta hace muy poco,
tantas escuelas, academias y liceos que proliferaban en Tetuán preparaban
maletas para cerrar i volver a España. Algunas, parte del patrimonio educativo
tetuani estaban patas arriba en las mudanzas hacia la vecina Sebta o Málaga. Tetuán
se quedaba sin su “patrimonio español” o por lo menos parte de él. Los alumnos
y estudiantes “indígenas” no sabían a qué santo dirigirse…
-
Que se van todos
-
Porque no soportan
vivir aquí más que como amos y señores, pero ahora que somos independientes van
a otro lado a buscar a quien reprimen de nuevo
-
No digas esto Si
Abdeslam
-
Si es la pura verdad ¿Por
qué no han pensado en estos pobres alumnos y estudiantes marroquíes? ¿Qué van a
hacer ahora, cambiar de lengua y de métodos pelágicos?
-
Rabat se vera obligado
a meternos el francés
-
Mira, Hach, aquí mismo,
le indicaba con su dedo Si Abdeslam, hasta hace poco, no podías encontrar tu
sitio. Desde las primeras horas de la tarde el lugar era, prácticamente asaltado
por manadas de jóvenes y menos jóvenes para tomar el té y charlar. Ahora ¿ves? Estamos
solos, tú y yo
-
Es el comienzo. La transición.
Ya veremos
-
Mucho me temo que ni
tu no yo vamos a tener esta oportunidad de ver
-
¿No ves que los Parra,
Llodra, Benet los doctores Turrégano y Duaso y vete tú a saber quién más han
decidido quedarse y están incluso mucho mejor que antes?
-
Es que nadie les
obligo a irse de aquí. Muchos de ellos nacieron aquí. Esta ciudad es de todos y
cabe para todos. Yo he visto hijos que lloraban. Que no querían irse. Esta
ciudad es suyo y este país es suyo
-
Volverán… volverán
-
Es la confusión de la situación
política y la incertidumbre de los primeros momentos de la independencia. Hay miedo.
Cunde el pánico. La gente no ve claro el presente y mucho menos el futuro. Me refiero
a los españoles.
-
No olvides que la
inmensa mayoría de nosotros nunca fue independiente
-
¿Qué quieres decir,
-
Que no conocen otra Tetuán
ni otro Marruecos más que bajo el protectorado. Nacieron y crecieron con esta
realidad política
-
Pero ellos no son marroquíes.
Aquí la mayoría de los residentes españoles son funcionarios de Estado. Aquí ha
dejado de existir el estado español. Parte de ellos van a ser contratados por
el Estado marroquí para seguir dirigiendo los asuntos corrientes, como los
maestros, profesores y jefes de administraciones locales, pero otro, como los
comerciantes van a tener que elegir entre acatar las nuevas reglas y leyes del país
o irse a seguir con las reglas y leyes de su país. Muchos de ellos ya han
optado: se quedarán.
-
Yo conozco a los míos.
Aquí no va a pasar nada ¿Has escuchado algún incidente xenófobo? No. :Ni
hablar! ni escucharas. Es que los marroquíes somos nobles. Todo puede cambiar…
todo menos la geografía.
-
Ahora has hablado
bien. No insultemos al presente, no nos enfademos con el futuro, no demos la
espalda al instante. Seamos pacientes
-
Vecinos ahora, antes
ocupantes-ocupados
-
Una nueva relación,
nueva mentalidad y por supuesto una nueva realidad
Levanto el vaso de té, tomo un
largo sorbo, coloco cinco reales en la mesa y dijo: “Hoy juro que pago yo”.
Desde la mesa vecina, alguien
que seguía la fértil conversación entre los dos hombres comenzó a recitar
versos del cubano José Marti:
Amo la tierra florida
Musulmana o española
Donde rompió su corola
La poca flor de mi vida
Era un anciano español que
levanto su “copa” de té y brindó por la fraternidad.
Hach Ahmed Escuchó atentamente
y no sabia por qué aquello le recordó Marta y sus “sermones”…
Mañana: capitulo
XII: El otro pecado (primera parte)
Comentarios
Publicar un comentario