En voz alta: Melilia/En vísperas de las comunales: Piden, 99 años de prisión a Aberchan, su esposa y su hija



A menos de una semana de las elecciones comunales españolas en el enclave de Melilia, el ministerio fiscal pide el encarcelamiento de Mustafa Aberchan, secretario general del Partido de la comunidad musulmana, Coalición para Melilla (CpM).

 
 Más grave aun también su esposa y su hija están en el punto de mira del procurador. Y no nos equivocamos: dicho procurador pide 99 años de prisión (casi un siglo)  para el líder del principal partido de la comunidad musulmana y para otros 13 cuadros del CpM, entre ellos su hija.
O sea: que el secretario general de la principal fuerza política musulmana de Melilia escapo por poco a la guillotina. Lo que ilustra que es màs que dificil ser politico y lider musulman en Melilia.
¿La acusación? “compra de votos” y probablemente “ser musulmán y representante de los musulmanes” (eso lo suponemos nosotros).
Según ABC citada por “Yabiladi” también la dirección del POSE de la ciudad está en el mismo banquillo de acusados. El ministerio fiscal ha pedido 132 años de cárcel y 272 años de inelegibilidad contra 17 cuadros locales del partido socialista local y otros 30 acusados, entre los cuales se encuentra el actual secretario general y su predecesor además de una cuantiosa multa que supera el millón de euros.
El anuncio de estas acusaciones interviene a pocos días de los comicios comunales en España que se desarrollaran el próximo día 24, lo que, lógicamente plantea más de una interrogación en torno a los verdaderos motivos de esta inquisición electoral por la que se trata de descabezar el resto de las fuerzas políticas en el enclave. De hecho el PP ya ha comenzado su campana mediática exigiendo ni más ni menos la “disolución “del PSOE y la “retirada” de Mustafa Abarchan y… ¿Por qué no? Ya que está donde está: la instauración del partido único.
Tanto las “acusaciones” como las “exigencias” pueden levantar otra ola de protestas cuyo desenlace difícilmente se puede determinar.
Por ahora “acusación” y “exigencia”’ suscitan el humor de los no-populares… en espera de la orientación del curso de esta extraña manera de excluir a los adversarios políticos.

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