Según el portavoz del
gobierno, el Jefe del gobierno, Abdelilah Benkiran ha informado al Consejo de
gobierno de ayer (jueves 16-4) que estaría dispuesto a presentar su dimisión “si
la investigación del accidente de tan-Tan probara la responsabilidad del
gobierno en este drama”.
Una primicia en los anales
gubernamentales en Marruecos porque el gesto de Benkiran inaugura una nueva era
de responsabilidad moral y política de los gobiernos y más exactamente de sus
jefes.
En su intervención a comienzos
del habitual Consejo de gobierno semanal, Benkiran evoco ampliamente la
tragedia de Tan-Tan, estimando que “cada uno debe asumir sus responsabilidades”.
Durante la rueda de prensa al
término de este Consejo de gobierno, el portavoz del gobierno indico que “una investigación
judicial sobre este trágico accidente esta en curso y cuyos resultados serán
publicado muy próximamente”.
Con esta franqueza, esta
responsabilidad y esta transparencia es todo el país que gana y más particularmente
los que pudieran encontrarse victimas de alguna circunstancia.
De hecho la revelación del
Jefe del gobierno ha sido amplia y diferentemente comentada por la prensa y
actores de la sociedad civil marroquí por tratarse de un gesto que estrena una
nueva metodología de gobernancia en Marruecos con la que los errores o los
reveses que impactan trágicamente en los ciudadanos, deberían pagarse, cuando
menos, con el cargo y la función.
No obstante, los primeros
elementos de la investigación ya han
determinado con exactitud de quién son los camiones, de quién es el petróleo y de
cómo se produjo el trágico accidente, pero es más que deseable que se esperar
con paciencia la publicación de los resultados de la investigación llevada a
cabo de manera independiente a fin de determinar las responsabilidades y
aclarar a las familias de las pequeñas victimas y a los marroquíes en general
las causas y las circunstancias de un triste acontecimiento que sigue
suscitando emoción no solo en Marruecos, sino, a juzgar por los mensajes de
algunos mandatarios al rey y al Jefe del gobierno, en muchos países amigos de
Marruecos.
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