Terrorismo cultural: Marruecos exige a la Unión Interparlamentaria una reacción


Marruecos, según  Al Ahdaz al-Magrebia citado por “Le360” esta mañana, ha exigido la inscripción de un punto de urgencia e el orden del día de la 132 Asamblea de la Unión Interparlamentaria (UIP), prevista para el día 28 de abril próximo en Hanoi. Se trata, según el rotativo y el sitio, de la amenaza que represen tan los grupos terroristas para el patrimonio cultural de la Humanidad.
 Daach barbarie
La destrucción del patrimonio cultural de la humanidad por los terroristas no debe dejar a nadie in diferente. Tampoco se debe relegar al según do plano. De donde la iniciativa de Marruecos de inscribir este punto de urgencia en el orden del día de la 132 Asamblea de la UIP. “El combate de Marruecos contra el terrorismo se prosigue y se va a proseguir sobre todos los planos y todos los frentes. Después de la guerra preventiva, llevada a cabo desde hace años contra las células durmientes en el reino, Marruecos lleva su combate al frente legislativo internacional, instando a una reacción firme contra la destrucción del patrimonio cultural de la Humanidad”, escribe “Al Ahdaz al-Magrebia” hoy, desvelando que la propuesta marroquí forma parte de 6 puntos de urgencia inscritos en el orden del día de aquél conclave parlamentaria internacional de Hanoi.
Esta iniciativa marroquí se enmarca en una concepción exhaustiva del flagelo terrorista que, mas allá de los peligros y las amebazas que representa para los inocentes, constituye también un peligro para lo que la humanidad tiene de más valioso: la cultura.
Lo que ha inducido a Marruecos abrir este frente, ha sido la amplitud de las destrucciones de las que ha sido objeto, a través del mundo en tero, el patrimonio cultural de la Humanidad, escribe el diario marroquí, subrayando que este combate necesita enmarcarse en el plano legislativo internacional en perspectiva de la criminalización de todo acto tendente a atentar contra este patrimonio cultural de la humanidad, peor aun: destruirlo.
Más allá de este reto, se trata de un sobresalto de conciencia que Marruecos intenta provocar entre los representantes de las Naciones, incitándolos a salir de su silencio frente a la criminal locura de los grupos terroristas que continúan dedicándose impunemente a actos de sabotaje contra los monumentos, cuyos orígenes remontan al albor de la historia.
“Estos actos criminales tienden a privar a la nación arabo-musulmana de lo que tiene de más inestimable: su civilización”, estima el diario marroquí.

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