Marruecos debe orientarse hacia un régimen de flexibilidad
de la tasa de cambio. Palabras de Abdelatif Jouahri, Wali de Bank al-Maghrib
quien declaro que la cuestión está aun bajo estudio pero que la decisión está
casi adoptada. El examen de las evoluciones de la inflación forma parte de esta
etapa preparatoria y el paso hacia una tasa de cambio flexible deberá
efectuarse en concertación con el ministerio de Finanzas así como la puesta en
pie de una cuenta capital para que Marruecos se convierta en un polo financiero
regional e internacional.
La liberación de la convertibilidad del Dirham podría
pues intervenir en una coyuntura de muy fuerte baja de los cursos del petróleo
que obstaculiza habitualmente nuestra balanza comercial. Por lo tanto no hay
ninguna razón para vacilar puesto que la libre convertibilidad del Dh entrañará
automáticamente u devaluación, lo que, evidentemente favorecería las
actividades de la exportación.
Por otra parte, el banco central prevé un
crecimiento de 5% para la economía marroquí en el 2015, pero ha decidido
mantener su tasa directriz en su nivel actual. Es decir: 2’5% después de haber
bajado en dos ocasiones, el año pasado en septiembre y en diciembre para
estimular la economía y en ausencia de riesgos inflacionistas.
Finalmente Jouahri ha expresado su satisfacción por
la liquidéis bancaria, que refleja una buena salud, aumentándose los depósitos
un 7% gracias al impulso de la contribución liberatoria. El año 2015 se anuncia
como el de la recuperación, sobre todo con una excelente pluviometria que
augura una buena temporada agrícola.
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