En el marco del intenso examen de la cuestión del aborto clandestino para recoger los diferentes criterios antes de formular su arbitraje, el Rey Mohamed VI recibió ayer (lunes 16-3) a los ministros de Justicia y de Asuntos islámicos así como al presidente del CNDH.
En un momento en que el debate
en torno al aborto clandestino es, más que nunca muy vivo en el país, el rey de
Marruecos decide tomar cartas en el asunto en el marco, como lo describe un
comunicado del gabinete real marroquí “de la interacción real permanente con
las preocupaciones de los marroquíes y de los diferentes actores nacionales respecto
a las cuestiones candentes” de la sociedad”.
Y la cuestión candente, como
lo explicaba ayer “Le360” es justamente la problemática del aborto clandestino.
Este respecto, el soberano marroquí ha
dado sus instrucciones para estudiar esta problemática “en el marco del respeto
de los preceptos de la religión musulmana, la toma en cuenta de las virtudes de
El Iytihad y el acompañamiento de la evolución que conoce la sociedad marroquí
y sus aspiraciones, respetando al mismo tiempo su unidad, su cohesión y sus
especificidades”.
Concretamente, el rey Mohamed
VI ha dado sus orientaciones a estos responsables del Estado para examinar “
esta cuestión, que se ha con vertido en asunto medico por excelencia”, llevando
a cabo “encuentros y amplias consultas con todos los actores concernidos a fin
de recoger sus diferentes opiniones al respecto”, cooperando, al mismo tiempo,
con el Consejo Superior de los Ulemas de Marruecos “para concertarse respecto a
los diversos criterios y orientaciones y presentar propuestas al monarca en un
plazo máximo de un mes”.
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