El rey Mohamed VI y familia prosiguen
sus vacaciones por Turquía. En Istambul, en sus salidas, el soberano marroquí no
deja indiferente a nadie, sobre todo a los marroquíes afincados en la gran
ciudad, para los cuales, la apariencia “privada” del rey es una ocasión providencial para tomar una foto con él y,
cuando es posible con su familia.
A pesar de su carácter
privado, la visita del rey de Marruecos y las salidas a los bazares y grandes galerías
de Istambul constituyen un foco de atracción informativa y para algunos órganos
de prensa grafica.
De esta forma, con su
tradicional humildad y su legendario sentido ciudadano, el monarca se deja
fotografiar con sus súbditos en los bazares y allá donde le reconocen.
Un inolvidable recuerdo con el rey de todos…
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