Ni estados Unidos ni la OTAN ni sus agentes regionales ni nadie ignora
que el fuerte ejército turco podría entrar fácilmente a Kobané y barrer a los
asaltantes del grupo “Estado Islámico” en muy pocas horas, para no decir en
minutos. Y es, justamente lo que el presidente Recep Tayyip Erdogan y su
gobierno no parece tener la intención de hacer por múltiples y obvias razones.
Y es que, para los sucesivos gobiernos turcos y
especialmente para el actual, el poder político kurdo (2 millones en Siria y
las de 10 millones de Turquia, además de los turcos iraníes que solo las fronteras
ficticias, según la concepción kurda, separan desde los anos 1920) constituye
un peligro para la “unidad turca” puesto que este poder kurdo es, o bien,
demasiado marxista o bien legítimamente diferente de la étnica turca.
De donde “sacrificar” a Daech en tanto que arma contra
los enemigos de Turquia, principalmente Siria y los kurdos (y desde hace unas
semanas el gobierno en gestación en Libia) solo se haría a cambio de importante
“bakchich” que los propios occidentales, a su frente Estados Unidos comienzan a
considerar a Ankara como la verdadera amenaza contra la paz en Oriente Medio.
¿Cómo considerar terrorista a lo que se calificaba y se
abusaba de calificar durante tres anos de “oposición sunita legal”? ¿Cómo combatir
a lo que, sin su ayuda y apoyo, se desmoronaría en pocos días?
El propio Redigan explicó fehacientemente las condiciones
para “exponerse sin apoyo ni concesiones” a la eventualidad de participar en la
lucha contra Daech: Zona de exclusión aérea en Siria. Otra terrestre. Entrenar
a la “oposición” siria para derrocar al régimen actualmente en Damasco. Es decir
cambiar la etiqueta de Daech sin recurrir a su eliminación… y por poco iba a
exigir la ida del presidente egipcio y el apoyo occidental a las milicias en
Libia.
De paso por Paris, el ministro de exteriores turco lo
explicó por su parte de manera más “lenitiva”: “armas a los combatientes kurdos
para defenderse seria”criminal”, dijo Mevlüt Cavusoglu. Y para adjudicarse mas
argumento, el canciller turco remato: “Y luego lo que pasa es la culpa de Assad
y la del ex primer ministro iraki Malki” y no de Turquia del PJD que contribuyó
a la creación de Daech y otros grupos ”opositores” en Siria y en Irak y sigue
contribuyendo con su apoyo y ayuda a todos ellos, exigiendo, como lo hizo su
presidente ayer, un franco apoyo de la comunidad mundial “si desea que Turquia desempeñara
un papel en ello”.
Comentarios
Publicar un comentario