Según el delegado del gobierno español en Sebta: La intervención marroquí del 3 de junio pasado en la isla del perejil era legal

Ya es oficial: Las fuerzas marroquíes tienen el derecho de acceder a la isla del perejil… “pero solo para desalojar a los inmigrantes subsaharianos”.

Así de simple y así de vejatorio y de irracional.

 

Según la respuesta del delegado del gobierno en Sebta, Francisco Antonio González Pérez a una pregunta escrita de un diputado de una formación vasca, Amaiur, citada esta mañana por “Yabiladi” el gobierno español ha reconocido este humillante y vergonzoso “derecho”.

En su respuesta a Amaiur, escaparate independentista, próxima a ETA que preguntaba en qué marco 32 elementos de las Fuerzas Auxiliares marroquíes penetraron, el 3 de junio pasado a la Roca (200 metros de las costas marroquíes), procediendo a la detención de 13 candidatos a la inmigración, el representante del gobierno del PP explico que la intervención de las fuerzas marroquíes “esta perfectamente conforme al acuerdo del 22 de julio del 2002 entre España y Marruecos” que había puesto término a la  crisis de la isla del Perejil.

Según este acuerdo, indico González Pérez, “España y Marruecos deben intercambiar a las personas que, desde su zona de soberanía, accedieran a la isla del Perejil” aportándoles “socorro” y “ayuda” o “invitándolas a abandonar la roca, de unos 13’5 hectáreas, que debe permanecer inhabitada.

“Por ello, según el delegado del gobierno español en Sebta, conforme a las obligaciones de las autoridades marroquíes sobre el salvamento marítimo y en coordinación con la Guardia civil, transfirieron, el 3 de junio pasado, a los inmigrantes a un punto seguro del territorio marroquí”.

De hecho, esta posición del representante español en la ciudad de Sebta es literalmente contraria a la adoptada por ONG y por el consejo general de los abogados que acusa al gobierno Rajoy de violar los derechos de los 13 subsaharianos “que se encontraban en un territorio español” (sic…) y de no ayudar a personas en peligro que huían de un país en guerra civil (re-sic…) y que España los debía acoger en tanto que refugiados.

Este es un problema de soberanía exclusivamente español, pero no en, la isla del Perejil porque no es territorio español y el acuerdo del 22 de julio del 202 entre Marruecos y España así lo reconoce explícita y solemnemente.

No obstante, las posiciones de, tanto las ONG como la del Consejo general de abogados de España tienen parte de razón o por lo menos de lógica… huérfana: Marruecos no tiene por qué convertirse en el cubo de basura de nadie, menos en un verdugo de los “derechos humanos” de fugitivos de guerras civiles.

De hecho, en Marruecos no solo ONG o el colegio de abogados, sino todos los marroquíes ven de reojo tanta servidumbre de su país y la dilapidación de los medios del contribuyente marroquí en luchar contra la inmigración clandestina y el tráfico de drogas en sus fronteras con España… si parte de los españoles no lo desean e incluso lo condenan.

Es decir: el gobierno marroquí debe reflexionar sobre estas acusaciones, adoptando una posición acorde al respeto de los derechos de los subsaharianos en peligro, y conforme a sus votos de “pasar” a España y de paso cesar de violar los “derechos” de los narco-traficantes a seguir “comerciando” con España.

Entonces veremos si las posturas hostiles a la aplicación de las leyes internacionales y a los acuerdos fronterizos, suscritos entre Estados en torno a la inmigración irregular o a la lucha contra el tráfico ilícito de drogas, no se adaptarían a las “nuevas” realidades y a los nuevos imperativos.