ASAMBLEA GENERAL DE LA ONU: La presidenta argentina llama al pan, pan y a la política occidental lo que es

 Después del discurso del rey Mohamed VI ante la Asamblea General, calificado por muchos como una requisitoria contra las patencias occidentales, la presidenta argentina Cristina Fernández de Kirchner ha corroborado al hablar hoy ante la Asamblea General de la Naciones Unidas en Nueva York las ideas reales marroquíes y se fue, incluso mas lejos: “La inmensa mayoría de los problemas a los que el mundo hace frente hoy se deben, dijo la mandataria argentina, a la ausencia de multilateralismo concreto y democrático”.

 

Cristina Kirchner aseguró que "no sólo son terroristas los que ponen bombas, sino también son terroristas económicos los que desestabilizan la economía de los países y provocan hambre, miseria y pobreza", y afirmó que "en épocas de buitres económicos y halcones de guerra, necesitamos más palomas de la paz y respeto al derecho", en alusión a los fondos buitres los que acusó de amenazar, hostigar, calumniar y provocar rumores e infamias”.

Al evocar la actual “coalición anti-Daech” la mandataria argentina recordó que muchos de sus miembros son  patrocinadores de este terrorismo y sus verdaderos creadores. Una acusación que se extendió a los que “no veían, durante la agresión israelí contra Gaza, más que los indefensos misiles palestinos que no causaban estragos ni pérdidas en vidas humanas, sin ver las miles de indefensos victimas palestinas asesinadas por las bombas de Israel”. También se refirió la presidenta argentina a los conflictos internacionales vigentes, a la situación de Palestina en Naciones Unidas y la necesidad de reformar algunos organismos multilaterales, como el FMI o el Consejo de Seguridad.

De tal modo que la presidenta de La Argentina denunció ante los propios protagonistas de la actual catastrófica situación, la geometría variable de Estados Unidos y sus aliados y la política de dos medidlas, dos pesos, cuando se trata de sus intereses estratégicos o geopolíticos o económicos.

Al terminar su discurso, la mandataria se dirigió al Consejo de Seguridad, donde el presidente de los Estados Unidos, Barack Obama, ya había iniciado la sesión mientras la mandataria argentina se encontraba exponiendo ante la Asamblea General.