En un informe de 214 páginas titulado
« Ilusión de justicia » la ONG Internationale Human Rights
Watch (siglas en inglés) acusa al FBI americano de “estimular, incitar e
incluso a veces pagar” a los musulmanes americanos para cometer atentados en el
curso de operaciones de vigilancia clandestinas totalmente montadas después del
11 de septiembre.
Dentro y sobre todo fuera de Estados Unidos. Con
Bush u Obama, la aberración no ha hecho mas que reforzarse, reactualizarse y
readaptarse a los “imperativos” geo-estratégicos, geopolíticos y geo-económicos
de Estados Unidos… a expensas de miles de vidas humanas y de miles de millones
de danos materiales.
El objetivo, según el informe citado por
L’express, hinchar el número de arrestos, pretendiendo, de esta manera,
proteger a los americanos y justificar las leyes anti-terroristas.
La vida del prójimo no tiene para ellos gran
importancia.
“La teoría del FBI, según el HWR, es que estos
individuos son peligrosos terroristas y que de
no haberles incitado a cometer estos actos terroristas, Al Qaida lo
habrá hecho”.
Lógica perversa que en vez de desaparecer o por
lo menos de remodelarse, se fue incrementando para alcanzar la actual dimensión
que amenaza a todos.
Más ilustrativo de esta doble moral: En más de
500 asuntos de terrorismo tratados por los tribunales americanos desde el 11 de
septiembre del 2001, “el ministerio americano de Justicia y el FBI han tenido
como punto de mira a musulmanes americanos en operaciones clandestinas de
contra-espionaje abusivas, fundadas en la pertenencia religiosa o étnica”.
Una “metodología” viciosamente perfeccionada
durante el mandato del actual presidente Barack Obama y los servicios de
seguridad, constitucionalmente bajo su tutela. De donde la tan cacareada
“Primavera árabe”, sus convulsiones en algunos países del “eje del mal”, según
Washington y sus hijos el EIIL (o EI actualmente), tolerado, mimado y promovido
al rango de oposición durante mas de tres años, antes de trasgresar las cláusulas
de los acuerdos que estipulaban la matanza de solo los musulmanes y el combate
solo contra el régimen sirio, asesinando a un periodista americano y
convergiéndose hacia los cristianos y kurdos de Siria y de Irak, Frente “Al
Nusrah” etc.
Ahora resulta que la amenaza llega hasta Londres,
donde fue decretada la alerta máxima contra la amenaza terrorista. Sin embargo,
tanto los británicos como sus aliados y co-artífices de la situación que
prevalece actualmente en algunos países de Oriente Medio no ignoran que el
terrorismo bajo su actual forma, es su invención.
Algo ha fallado… algo fallará y en el fallo el
mal, erróneamente calculado, llegara hasta sus diseñadores.
Se caen del burro.
Del 95% de los “dirigentes” y “combatientes” del
EI en Siria y en Irak, llegados a estos países procedentes de la vecina Turquía,
que siendo miembro de la OTAN,
no podía proceder de manera unilateral, sino en concertación con sus socios de
la alianza, entre ellos EEUU, Francia e Inglaterra, más del 28% o bien son
súbditos británicos o han vivido largos periodos en el Reino Unido, tejiendo
fuertes vínculos con sus servicios de inteligencia.
¿Es de la dimensión que describen Estados Unidos
y sus aliados la amenaza terrorista en Irak y Siria?
Muy dudosa. No obstante, en caso de que lo fuera
no seria difícil establecer las responsabilidades. Otra cosa seria hacerles
responder de sus crímenes como lo hacen ellos con los mandatarios que derrocan
o que persiguen.
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