Estos son los datos de hoy:
175 mártires, 7700 heridos y nuevos 20 muertos en la no menos mártir Jabalia.
Sin embargo, Estados Unidos
acaban de anunciar un paquete de ayudas militares “para reforzar la seguridad israelí”.
¡Alucinante!
Por su parte el primer
ministro israelí, Benyamin Netanyahu y el resto de los miembros de su gabinete
no cesan de hablar de “destrucción de túneles”.
¿Qué túneles? ¿Qué objetivos? ¿Y
con qué finalidades? ¿Dónde se ha visto a un “victorioso” al que acude el
padrino para salvar? ¿Qué tipo de victorias es la que reivindica Israel, a la
que el esfuerzo de su “guerra” le cuesta, según datos de su ministerio de
finanzas casi 2 000 millones de dólares, además de las vidas “humanas?
En este orden de ideas Israel
acaba de anunciar otra cantinela: el refuerzo de sus asesinos en Gaza con 16 000 terroristas suplementarios para
alcanzar la enigmática cifra de 86 000 ante una población desarmada e
indefensa.
Esta vez, de poco puede servir
la psicología de la presión. 16 000, el doble, el triple o más hay, como había
dicho el gran Salah Edwin Al Ayubi en estas mismas sagradas tierras de
Palestina ocupada, sitio para enterrarlo a todos.
¿Puede estar venciendo quien
recurre a sus reservas y a la ayuda militar de su padrino americano?
Y como colofón: La Cámara de representantes
americana acaba de aprobar una moción para un recurso judicial contra el
presidente Barak Obama “por sobrepasar sus prerrogativas”.
Dicho con otras palabras: que debía
intervenir directa y descaradamente para apoya a Israel, sus Bormanes y sus
Eikhmanes para exterminar al pueblo palestino.
No. Israel está en peligro de…
justicia y el derecho.
Comentarios
Publicar un comentario