Una pregunta para comenzar :
¿Qué potencia occidental puede
tolerar la existencia de un estado terrorista justo ante las mismísimas narices
de Israel?
Ni siquiera hace falta
responder, pero sí reflexionar sobre el fenómeno terrorista, su creación y
sobre todo, las motivaciones y finalidades de quien lo haya concebido.
En su apuesta por una guerra
fratricida entre sunitas y chiítas, el sionismo y sus aliados árabe-occidentales
nunca lo lamentarán lo suficiente aunque todo apunta hacia el incumplimiento de
las promesas de todos hacia todos: ni EEUU y sus (verdaderos) aliados
occidentales cumplirán sus promesas a sus domésticos árabes ni el “Frankestein”
creado en Irak, sus compromisos con Washington, sus aliados y sus domésticos.
¿Botón de muestra?
El domingo pasado Estados
Unidos han decidido controlar mejor a sus visitantes, imponiendo una nueva política
de cacheo sistemático y de desconfianza respecto a los aparatos electrónicos. La
nueva medida se aplica a Oriente Medio, pero también a África e incluso Europa.
No cabe duda: las « cosas »
escapan a EEUU y a los que giran en su órbita y no se sabe por qué no lo había
previsto.
Trataremos de explicarlo, pero
vayamos por partes.
El ex empleado de la agencia
nacional de seguridad americana, Edgard Snowden acaba de revelar que “a fin de
desplazar a todos los extremistas del mundo hacia un solo lugar, según una
estrategia bautizada “El nido de los abejorros”,
los servicios de la inteligencia británica y americana y el Mossad han
colaborado juntos para crear el ex EIIL o ahora “Estado islámico”.
Los documentos de la Agencia nacional de
seguridad americana evoca “la reciente puesta en pie de de un antiguo plan británico
conocido como “nido de abejorros” para proteger a la entidad sionista, creando
una religión con slogans islámicos que rechace toda otra religión o confesión”.
Según los documentos de
Snowden, “Abu Bakú Al bagdadi, el autoproclamado “Califa” de la nueva “entidad”,
ha seguido una formación militar intensiva durante todo un ano con instructores
militares del Mossad sin contar cursos para dominar las artes de los discursos
y la retórica así como cursos de teología”.
Una realidad seguida de otra:
Muy recientemente el EIIL o “Estado
islámico” se apoderó en Mossoul, según The Guardian, de un verdadero tesoro:
1000 millones de dólares, además de decenas de armas pesadas (carros de combate
y artillería pesada y ligera, abandonadas por las fuerzas iraquíes en su
desbandada, una desbandada que, cuando menos, suscita más de una pregunta y más
de una sospecha.
Si sumamos a esto las
cuantiosas “ayudas” en metálico y en material bélico podemos ir formando una pequeña
idea del crecimiento, las posibilidades y la más que posible metamorfosis del “Estado”
de Al Baghdadi… una metamorfosis que ha comenzado y que, aparentemente y a juzgar
por el curso de los acontecimientos ni previa el plan occidental inicial ni
esta resultando del agrado de algunos de sus “patrocinadores” árabes.
De este modo, las recientes e
insistentes amenazas contra Marruecos y a través de algunos países europeos
como España, se deben tomar muy en serio.
¿Por qué?
Entre muchas otras cosas
porque la organización terrorista Al Qaida en el Magreb Islámico, AQMI se
dispone a prestar pleitesía al Bagdadi, lo que significa que el peligro está en
nuestras puertas y porque más de 1 500 terroristas marroquíes juegan con
el fuego en Irak y Siria, sin olvidar la metodología de “algunos” vecinos de
Marruecos cuando se trata de desestabilizarlo, sabiendo que el incontrolado
arsenal en Libia puede beneficiar de esta divergencia inter-magrebí para
circular “libremente” de un lado a otro.
En síntesis: la amenaza terrorista
contra Marruecos es real, pero no más real que la que se vislumbra contra los
que “mantienen excelentes relaciones con los enemigos del “Estado islámico”,
principalmente Estados Unidos y Francia”… que son todos o casi todos.
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