El anuncio lo hizo la compañía
británica Longreach: descubrimiento de un potencial de gas en un yacimiento
offshore de Kamar-1 a
una profundidad total de 2 790 metros en la estructura de Kechoula,
ubicada en la licencia Sidi Mokhtar a nivel de la cuenca de Essauira.
El presidente ejecutivo de la
sociedad británica ha explicado que “se trata de resultados exploratorios muy
prometedores de nuestro segundo permiso marroquí”.
Dennos de Sharp preciso que
esto “constituye otra respuesta técnica a nuestra creciente comprensión del
gran potencial de recursos en la estructura de Kechoula”.
Además, esta vez Kamar-1 no se
ha encontrado con agua en profundidad, lo que para los accionistas de Longreach
y para sus socios marroquíes constituye una excelente noticia.
Kamar-1 ha sido cortado en dos
intervalos de gas distintos. Los datos obtenidos serán analizados con los
resultados de Koba-1 para establecer un programa de trabajo en los intervalos de
gas encontrados en los dos pozos.
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