Los acontecimientos en los
Campamentos de Tinduf se suceden y casi se parecen: la semana pasada era el
anuncio del Movimiento opositor “Jóvenes por el cambio” de la creación de un
aparato militar. Antes eran grupos de “refugiados” que denuncian la
malversación de la ayuda internacional por el “Presidente” vitalicio y los
suyos y hoy es un gendarme que decide romper el silencio y denunciar, en una grabación,
el recurso excesivo de la fuerza por las milicias polisaristas contra las
manifestaciones de la población de los campamentos y contra todo quien se
atreviera a protestar.
En efecto, de nuevo la
televisión regional de Layun ha difundido en su telediario nocturno ayer una grabación
de otro oponente a la dirección eterna del Polisario. Esta vea se trataba de un
partidario del Movimiento “Jóvenes por el cambio”, sino de un miembro del
aparato opresor al servicio de Argelia: un miembro del cuerpo de la
gendarmería, lo que corrobora el éxito de la popularidad de la iniciativa “ un
minuto por la verdad” lanzada hace dos meses ante nuevas categorías de la
población de los campamentos.
Oculto detrás de un vehiculo
perteneciente a la tienda de campana llamada “Wilaya de Dakhla”, el joven
gendarme ha leído un comunicado de un minuto treinta segundos: una requisitoria
contra las violaciones de derechos humanos en Tinduf. El joven ha revelado que
sus colegas “están obligados a reprimir diariamente las reivindicaciones de los
habitantes” reconociendo el uso exagerado de la fuera contra los protestantes.
El, hasta ahora, miliciano a
sueldo de Argel, denuncio en su mensaje la exclusividad de los ascensos y promociones
a los próximos de la cúpula polisarisra y a la esposa del “presidente”
vitalicio, Mohamed Abdelaziz, la argelina Khadija Hamdi.
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