Ginebra/Negociaciones inter-sirias: Vuelva Usted mañana…

Desde luego no se puede decir que la paz interesa a alguien. En Ginebra, casi 5 años de Portada en los diferentes órganos de prensa occidentales y hasta árabes, la crisis (o la guerra) siria no parece atraer la atención cuando se habla de paz o de solución.


En Ginebra, sin mapa de ruta terminaron días de intensos esfuerzos de Stephan Di Mistura y su equipo de la ONU con vistas a encontrar alguna fisura por donde “colarse”.
Al final se puede decir todo… todo, menos que la tentativa de Naciones Unidas (o de Rusia y Estados Unidos) haya fracasado. Ginebra ha impuesto lo esencial: no hay no puede haber alternativa a una solución política negociada en Ginebra.
.Y Por qué Ginebra? Sencillamente porque, la ONU que ha cometido o ha sido cómplice de todas las atrocidades contra Siria difícilmente hubiera podido una respuesta afirmativa del régimen de Bachar al Assad para negociar o para confiar. Fueron, eso sí, Estados Unidos para unos, Rusia para otros y las maniobras de las mil y una oposición manipuladas por muchos ha resultado ser pólvora mojada: oposición de Riad, de Doha, de Estambul, de El Cairo y hasta Moscú ya tiene su oposición, además de la oposición “oficial”. ¿Con quién hablar y en quién confiar?
En el terreno queda la verdadera oposición: Daesh y Nosra, pero esta es otra cuestión.
Ginebra parece haber dilatado las lenguas y, de cierta manera, apaciguar, sino las voluntades, por lo menos las intenciones. Rusia, con lapsus tras otro, revela su estrategia y con ella su intención. La última declaración rara fue hoy la de su ministro de defensa Sergueï Choïgou quien acaba de afirmar “que no es cierto: la ida de Bachar el Assad no acabará con el terrorismo”. ¿Qué quería decir, o mejor dicho qué insinuaba?
Desde hace días los lapsus de los dirigentes rusos se suceden y en casi todo se parecen.
En damasco se limita a tomar nota. Se equivoca quien cree que el régimen no tiene medios de disuasión. Moscú ha hecho el destape, pero la venganza es un plato que se come frio.
La evolución de la cuestión siria en función de nuevas coordenadas de una nueva función en el mundo árabe presagian, o bien, un incendio de los frentes en Siria, preludio de una claridad que no se ha logrado hasta ahora, o bien el comienzo del fin de un conflicto montado con todas sus piezas y que ha comenzado a mostrar sus límites.
En el mundo árabe, Estados Unidos e Israel en procuración de sus satélites regionales lo han logrado todo… todo,  menos lo esencial: derrocar al régimen sirio y no parece que lo vayan a lograr en corto, medio ni en largo plazo a pesar de la ayuda rusa.

 




Comentarios