Según
el Observatorio sirio de derechos humanos (OSDH)olo en el 2015 que nos
disponemos a despedir, 55 219 personas han muerto en Siria, de ellas 13 249
civiles entre los que figuran 2 574 niños. Una cifra en declive en comparación
con el 2014 cuando 76 021 sirios habían perdido la vida.
La mayoría de los muertos son “combatientes”, de
ellos 7798 terroristas y más de 16 000 “yihadistas” de Daesh, del Frente Nosra,
ala siria de Al Qaida o de las milicias asociadas en esta guerra sucia no contra el régimen como se
pretende, sino por intereses propios y ajenos, màs ajenos que propios.
En total, 17 686 personas han caído en las
filas de las tropas oficiales, de ellas, más de 8800 soldados del ejercito árabe
sirio, màs de 7000 miembros de las milicias afines al régimen y 378 hombres del
movimiento libanés Hizbolah, lo que desmiente categóricamente el movimiento de
Hassan Nasralah.
Unos 1214 mercenarios extranjeros han resultado
muertos en estos 5 anos de guerra, según la OSDH cuyas conclusiones se deben
tomar con suma precaución y que precisa que 274 p)personas fallecidas no
pudieron ser identificadas.
Desde el comienzo del conflicto , la ONG ha contado
la muerte de 260 758 personas entre ellas 76 000 civiles.
Los combates han costado la vida también a 40 121
terroristas mientras que la aviación rusa y una pretendida coalición internacional
dirigida por Estados Unidos han intervenido recientemente en el conflicto.
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