Oriente Medio y su destino: Preguntas necesarias



No debe importar lo que dijera David Camerun ni su homólogo francés, Laurent Fabius ni siquiera su mentor americano John Ferry (que dicho sea de paso ha comenzado a mostrarse más moderado que sus subordinados en el mundo). Lo importante para Oriente Medio seria lo que debieran decir los propios dirigentes regionales, especialmente los del Golfo, de Egipto, Jordania y en más o menos medida los del Magreb como, entre otros, Argelia y Marruecos.
 Résultat de recherche d'images pour "Photos de la Ligue arabe"
El problema no es solo Irak y Siria o el Yemen o incluso Libia. Discreta, pero ineluctablemente, alguien mueve las piezas del tablero medí oriental: Egipto debe dejar de ser superpotencia árabe. Siria, Irak necesitan retoques en sus respectivas cúpulas y en el modo de su gobernancia y el nivel de su servidumbre para con Occidente, especialmente Estados Unidos y el Líbano que debe conocer una remodelación y una “limpieza” doctrinal.
¿Y el resto?
Sin comentario, porque ya van siendo 5 larguísimos años en que se ha ensayado todo en Siria y, a falta de lo cual en parte, en Irak.
Las verdaderas revoluciones en Irán contra el Shah, en Túnez contra ben Ali, en Egipto contra Mubarak y en Libia contra Ghadafi han durado menos de un mes.
En el mundo árabe nadie está habilitado a dar lecciones a otros de democracia ni de libertad, menos aun los que lo pretenden.
¿Hasta cuando? ¿Acaso debemos creer a Obama que “esto” tiraría para, por lo menos 30 años? O sea: 3 décadas de servidumbre total y de un neo-colonialismo no declarado o sin  querer, como ocurre ahora.
La solución está entre las manos de los responsables árabes y no en la de los extranjeros, que, por el bien de Israel debe seguir existiendo todas las bandas terroristas e incluso reforzarlas.
Las llamas del terrorismo que han creado, apoyado y mantienen, han comenzado a llegar un poco más lejos y países como el Reino Unido prevé un recrudecimiento de la actividad terrorista en su territorio dentro de poco.
Irak, Siria y junto a ellos Líbano, Yemen, Libia y Egipto nunca olvidarán esta siniestra conspiración contra su integridad, su unidad y su propia existencia de Occidente concientemente y de Rusia inconcientemente al no calcular desde el comienzo, en su justo valor la amenaza que representaban/representan todavía  más ahora con la pleitesía a “Dae’sh” de todas las organizaciones rebeldes en el Caucaso: Chechenia, Daguestan, Ingouchia y Kabardino-Balkaria.
Por ahora, se trata de defenderse… y se defienden como pueden. Pero, paralelamente en Oriente Medio, algo se mueve. Indicios de un comienzo de concienciación de lo que debería ser la verdadera solución.
Bachar el Asad, probablemente no es ni seria el mejor presidente de Siria aunque esto es una cuestión intrínseca y exclusivamente de la incumbencia del pueblo sirio, además de que la alternativa no es ni podría ser el autoproclamado califa Ibrahim, alias, Abi Bakr Al-Baghdadi.
La prioridad debería ser acabar con la lacra terrorista, luego con la colaboración de Naciones Unidas, Liga árabe, la contribución de los amantes de la paz y de la justicia y de todas las sinceras voluntades se pasaría a la etapa de saber quién es quién en Siria o en cualquier otro país, diana actualmente del terrorismo. Es decir elecciones, referéndum o simplemente consultas bajo auspicios del organismo mundial para determinar y cristalizar los votos y los deseos de los sirios o de otras nacionalidades en Oriente Medio.

Comentarios