Marruecos/Corrupción: La ICPC: una concha vacía



En su edición de hoy el diario L’Economiste afirma que, contrariamente a los anhelos de muchos, la Instancia central de prevención de corrupción (ICPC) corre el riesgo de seguir siendo, como lo califica esta mañana “Le360” una “concha vacía”.

 

Abdeslam Aboudrar

 Abdeslam Aboudrar, presidente de la ICPC

En efecto, después de mucho retraso, especialmente a causa de desacuerdos entre los diputados de la mayoría y el gobierno, la ley orgánica sobre dicha instancia ha sido adoptado, pero, según el rotativo “sin las enmiendas claves de los diputados”. Tampoco se ha tendido en cuenta el memorando enviado por el presidente de la ICPC a los parlamentarios.

De esta forma, el principio de la denuncia anónima, muy reclamado por la comisión parlamentaria de justicia no figura en la ley. Según L’Economiste, citado por “Le360” el ministro encargado de asuntos generales y de la gobernancia, Mohamed El Ouafa, defensor del texto “no quería más”, con liderando que este texto es un complemento de otros existentes y prefiriendo hacer beneficiar a los denunciadores de la protección prevista en el código del procedimiento penal.

Desde ahora en adelante, la ley orgánica estipulará que todas las denuncias enviadas a la ICPC deban mencionar la identidad completa del denunciador así como su dirección.

Según L’Economiste, esta obligación suena “como una marcha hacia atrás en lo que se ha realizado hasta ahora”. No obstante, el nuevo montaje garantiza la protección de los 12 miembros de la instancia para poder ejercer sus funciones en toda seguridad e independencia.

El ministro El Ouafa se ha  negado dar también a la ICPC la posibilidad de ampliar la definición de “corrupción” a los dominios político, administrativo, económico y financiero. La definición seguirá pues, limitada a actos de corrupción, abusos de poder y malversación de fondos aun que fue extendida hacia “todas formas de depravaciones citadas por las leyes especiales” un término, cuando menos, confuso e impreciso.

Además, la ICPC no podrá tener secciones regionales “lo que limita su representatividad regional”, estima el diario. Dicho esto, se debe precisar que el presidente de esta instancia Abdeslam Aboudrar no ha suscitado su indignación. Al contrario, según él la prioridad debe orientarse hacia la puesta en pie de un “organismo de gran envergadura nacional”.

La nueva forma de la ley orgánica reduce las “prerrogativas del presidente de la instancia el cual, desde ahora en adelante no podrá acumular el ejercicio de una función en el sector privado ni con la gestión de un establecimiento publico con fines lucrativos con la presidencia de la instancia.

Finalmente el texto impone al presidente obtener una puesta en disponibilidad si ocupa una función en la administración pública.

En cuanto a los 12 miembros de la instancia, deberán ser elegidos en función de su experiencia profesional acumulada en el seno de esta misma institución. De tal modo que 4 miembros serán nombrados por el rey Mohamed VI, otros 4 por el jefe del gobierno, todo en un estricto respeto de la paridad para un mandato de 5 años renovables.

Por su parte el presidente, será nombrado por dari (decreto real). Y si la futura instancia será obligada a presentar un informe anual ante el parlamento, en cambio no será autorizada a elaborar estudios sobre la corrupción y los medios de luchar contra el flagelo.

Comentarios