En vísperas de comicios comunales en Marruecos: 104 presidentes de consejos comunales ante la justicia: ¿Operación manos limpias?

Un informe del ministerio marroquí del interior indica que recursos judiciales contra 104 miembros de consejos comunales están en curso actualmente.

 

Según el diario marroquí “Al-Akhbar” en su edición de hoy, citado por “Le360”, estos procedimientos judiciales revisten una importancia capital, debido a que los resultados van a tener un impacto directo sobre la elegibilidad de estos electos que, una vez condenados, tendrán que abandonar los consejos comunales a los que pertenecen actualmente.

Fuentes del ministerio del interior, citadas por el diario marroquí, han subrayado que, conforme al articulo 71 de la Carta Comunal, 8 expedientes relativos a las cuentas administrativas rechazadas por los consejos comunales urbanos fueron presentados ante tribunales regionales de cuentas (CRC) para su examen.

Asimismo Interior ha recibido 17 informes sobre la gestión de los asuntos de algunas colectividades territoriales y sus instancias que contienen, según el citado diario, observaciones en torno a irregularidades en finanzas y contabilidad, mercados públicos, urbanismo, bienes comunales y gestión administrativa además de los recursos humanos.

De este modo, frente a las violaciones de la ley cometidas por los presidentes de los consejos comunales, la inspección general de la administración territorial ha sido informada para enviar comisiones de inspección a este respecto.

La Dirección general de Colectividades Locales en el ministerio del interior recibió un total de 1393 informes relativos a las reuniones de los consejos comunales, de los consejos de distritos, de los consejos provinciales y prefectorales y de los consejos de las regiones.

104 altos cargos de la gestión local ante los tribunales. Una buena cosa, pero extremadamente inquietante si no se aplicara la ley y que se tome el asunto de la manera más estricta y más rigurosa porque sus, hasta ahora, presuntas siniestras obras pueden, por un lado, acarrear un mal cuya dimensión es absolutamente indeterminada y mancillar el desarrollo de las próximas elecciones comunales en Marruecos con las que la inmensa mayoría de los marroquíes cuentan en tanto que un sano punto y a parte en la gestión de los asuntos corrientes locales y nacionales.

De donde la imperiosa necesidad de las asociaciones de lucha contra la prevaricación y el fraude a todos los niveles de la gestión local o nacional, de la sociedad civil quedarse “al loro”, seguir este expediente y ejercer/cumplir sus derechos cívicos y constitucionales.