“Combatientes” marroquíes del “EI” transfieren parte de sus “sueldos” a sus familias: “Daesh” y sus “asalariados”:



Otra “realidad” que explica la tumultuosa y nunca suficientemente explicada existencia, desarrollo y sobre todo la potencia (de fuego y de otras atrocidades) de Daech: ¿Por qué hay tantos extranjeros con la nebulosa?
 Daech abat un avion de la coalition internationale et capture son pilote

Imagen distribuida por el “EI” del piloto jordano capturado el pasado día 24


Comienzo de respuesta: los marroquíes de Daesh (o su inmensa mayoría) consideran este “yihad” como cualquier otra tentativa de “buscar la vida en otra parte”, pero como Europa está en crisis y como, a causa de la explotación y tráfico de carburante (2 millones de dólares por día) y otros medios (financiación multimillonarias de algunos países que nadie ignora),  el llamado “Estado” islámico estrena su escaño con las entidades petrodólares, considerándose entre los que mejor pagan a esta nueva “mano de obra” mercenaria.
De este modo, los marroquíes de la organización terrorista cobran exorbitantes sueldos de los que hacen beneficiar incluso a sus familias en su país.
¿Cómo?
Responde hoy Akhbar Al Yaum citado por “Le360”:
Los marroquíes del “EI” transfieren a través de intermediarios extranjeros, cada vez mas, su dinero a sus familias”, escribe el rotativo que explica como y por qué circuito (o circuitos pasa este dinero gana do matando o cumpliendo operaciones suicidas): “A menudo los marroquíes de Daesh, explica Akhbar Al Yaum después de reconstituir el circuito de este  dinero sucio desde su fuente, hasta su destino en Marruecos, recurren a los ‘servicios’ de especuladores sirios para hacer llegar su dinero a intermediarios turcos (en la ciudad de Antakia) que lo transfieren, a su vez, hacia mediadores europeos o marroquíes afincados en Europa, encargándose éstos a hacerlo llegar a las familias de los ‘combatientes’ marroquíes de Daesh en Fnideq, Tánger o Casablanca”.
Otra astucia para hacer llegar este dinero sucio a su destino en Marruecos (o a otros destinos en Europa o Asia) consiste, según el diario marroquí, en recurrir a una red clandestina en una mezquita en Holanda: Jama’a Qabae, reconvertida en instrumento de trafico ilícito de fondos en beneficio de los malversadores que se encuentran en Turquía, Holanda y en Marruecos.
Los sueldos de los “combatientes” marroquíes de Daesh oscilan entre 13 000 a 26 000 Dh sin contar las primas que alcanzan en algunos casos los 1600 Dh que se conceden a titulo de subsidios familiares.
O sea: ofertas infinitamente superiores a las que cobran los “combatientes” locales sirios e irakies (de 4000 a 5000 Dh) que tampoco es, para ellos una miseria.
Seis meses después de la ocupación de inmensos territorios en Irak y Siria, el llamado “Estado” islámico ha logrado crear un verdadero impero para “comercializar”, a través de una red muy compleja de traficantes de petróleo en Turquía, Jordania etc.
Queda por preguntarse: ¿Quién compra este petróleo?
Se puede responder: Los que lo han creado ayer y afirman hoy combatirlo.

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